lunes, 16 de marzo de 2009

Arwen

Tengo una gata en casa q es un tesoro. Arwen es una dulzura de gata.

Me busca siempre, necesita mis mimos, mis caricias, mis juegos... le encanta dormir dentro de la cama con aLoNNe y conmigo, es ducharme y meterse en la zona donde pongo los botes de champú y cremas para quedarse conmigo, es regar las plantas y meter la pata debajo del agua de la regadera, es cocinar y andar enredando por la cocina o subida en el mueble más alto, es llegar a casa y estar en la puerta del pasillo esperando.... es mirarla y maullarme suavito.

Mi gata es coscona, es traviesa, es divertida y es .... OREJONA !!!!!!!!!!!

De pequeña, cuando llegó a casa por primera vez le sacamos unas fotitos.
La pobre odiaría el flash porque por el camino de la tienda a su nuevo hogar había unos 30 Km y hasta vomitó.
Siempre que veía las fotos le decía que era una orejona, q tenía muchas orejotas...

Ayer me estaba dando un baño y allí estaba Arwen, sentada encima del W.C. y mirándome mientras le decía cositas... ahí me dí cuenta de que... aunque ya ha crecido muchísimo desde la primera vez que la vi... SIGUE TENIENDO UNAS OREJOTAS ENORRRRMES.

Q? No os lo creeis? Pues mirad !!!!!!!
Su llegada a casa:

Arwen
A día de hoy:
Arwen

Eso sí, es mi OREJOTAS preferida !!!!!!!

Buenas noches

Alma

5 Comments:

En las nubes. said...

Es preciosa...que cosita!!!
Es increíble el cariño que se les puede coger a los animales.
Un besito y buenas noches!!!

London said...

Que cosita mas linda. Es muy raro que un gato sea así de cariñoso has tenido mucha suerte.

Muchos besos

tia elsa said...

Que bonita es! yo tuve una gata que le pusimos de nombre oreja,justamnte por el tamaño de sus orejs, o sea, Arwen no te sientas mal no eres la única gata orejona jajaja!

Anónimo said...

Es muy bonita, ya he comentado alguna vez que a mi los gatos no me gustan, me parece que van a los suyo... pero la tuya es una excepción, por lo que cuentas es muy cariñosa.
Los animales tienen un amor incondicional que a veces emociona. Es increible.
Un saludo.
Raquel.

Lina said...

Pues yo no la veo tan orejotas... No soy muy de gatos, por ello no me suelo fijar demasiado en ellos, pero a mi me resultan normales.

Orejas las que tenía la madre de mi Cumba, que parecía Dumbo, menos mal que ella no las heredó.

Besos.